Las necesidades humanas son manipuladas por los fabricantes de medios artificiales, aunque muchas de ellas sean producto de la evolución la búsqueda permanente de soluciones, gran parte de los bienes y productos que se ofertan son innecesarios y hasta dañinos para la vida y la convivencia. A pesar de conocer sus nefastas consecuencias como la contaminación ambiental, muchos humanos son estúpidos y tercos pues se someten con facilidad a una publicidad comercial esclavista que vulnera cualquier consideración y racionalidad.
Estos primeros tres post sintetizan mi crítica a las conductas humanas frágiles que se someten a la esclavitud comercial y a la adicción consumista.